Rafael Adriano Román Román |
SANTIAGO. Uno de los imputados en el intento de asesinato del abogado santiaguero Jordi Veras, incidentó la audiencia, siendo ésta la quinta ocasión que provocan este tipo de subterfugio legal para impedir se inicie el juicio.
El Primer Tribunal Colegiado del Distrito Judicial de Santiago, aplazó el juicio de fondo a Adriano Román Román, autor intelectual; Franklin Reynoso, y Francisco Carela Castro, acusados del fallido asesinato al abogado y comunicador Jordi Veras, ocurrido en el 2010, cuando el abogado llegaba a las instalaciones del canal 25 donde trabajaba en programa de televisión.
La táctica de Franklin Reynoso Moronta fue argumentar que no llegó a un acuerdo económico con su abogada, por lo que tuvo que despedirla.
Ante la falta de un representante legal, el tribunal dispuso que el imputado Franklin Reinoso sea defendido por un abogado público.
El nuevo juicio contra el grupo de acusados, que incluye al empresario Adriano Román Román fue fijado para el 19 de julio.
El 17 de mayo, el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Judicial presidido por la jueza Anneli Torres acogió la solicitud de variación de un año de prisión preventiva en favor de Arturo José Ferreras del Castillo y Roberto Zabala Espinoza tras el pago de una fianza de RD$100 millones.
De inmediato los abogados Veras apelaron la decisión.
Otros imputados son: Engels Carela Castro Roberto Zabala, Candy Caminero Rodríguez y Arturo José Ferreras del Castillo, a quienes la Fiscalía les imputa convertirse en una asociación de malhechores para cometer tentativa de asesinato en contra Jordi Veras.
Jordi Veras Rodríguez; hijo del Dr. Ramón Antonio Veras, mejor conocido como Negros Veras, fue el abogado de Miguelina Llaverías en el primer proceso contra Román en el 1977. Logrando que Román fueras entenciado al pago de RD$25,000 000.00 (veinticinco millones de pesos), y a prisión, quien mostró su inconformidad.
Enojado por el buen trabajo del abogado, Román ofertó la suma de RD$1.5 millones de pesos, para que sicarios eliminaran al representante legal de la señora Llaverías.
Román contacta al recluso Franklin Reynoso, quien también guarda prisión en la cárcel de Rafey Santiago y planean la conspiración para matar a Jordi. Reynoso contrata los servicios de Engel Carela, quien organiza un encuentro en la cárcel con su hermano Francisco Alberto Carela Castro, para que apoyado en su compañía de detectives privado organizara y ejecutara la trama. Exigieron el pago de RD$2.5 millones de pesos, eventualmente se transaron por RD$1.5 millones.