Una vez concluí los tres trabajos que componen la parte medular del libro: Parte de mi vida: para mis hijos, nietas y nietos, en interés de conocer la opinión de cada uno de mis hijos sobre los mismos y mi persona, les remití las comunicaciones siguientes:
Santiago de los Caballeros..
15 de octubre, 2012.
Señores
Ramón Antonio Veras Rojas
José Jordi Veras Rodríguez
Ho-chi Ernesto Veras Rodríguez
Yury A. Manuel Veras Rodríguez
Alexei Valeri Veras Rodríguez.
Sus Manos.
Mis queridos hijos:
Sin mucho preámbulo, paso de inmediato a exponerles el motivo de la presente:
Hace varias semanas puse a su disposición y vista, tres escritos dirigidos a ustedes y a sus hijos e hijas, con los títulos: A.- Solamente para mis hijos, nietas y nietos; B.- Algo más solamente para mis hijos, nietas y nietos y, C.- Mucho más solamente para mis hijos, nietas y nietos.
Quiero por la presente solicitarles que cada uno de ustedes exponga por escrito su criterio con relación a los tres trabajos, y la opinión que cada quien tiene, individualmente, con relación a mi persona desde el momento de uso de razón hasta hoy.
Prometo respetar su opinión, sea cual fuere ésta y su extensión, lo que dejo a su discreción.
Asimismo, tengan la seguridad que aceptaré la decisión del que se abstenga de emitir su opinión, sin hacer ningún reproche por la posición adoptada. Espero por la opinión hasta el 31 de diciembre del presente año 2012, interpretando que aquel que no diera respuesta a esta petición en esa fecha, ejerció su derecho a guardar silencio..
Hasta ahora he decidido mantener en absoluta confidencialidad los tres escritos, los cuales solamente son conocidos por ustedes y personas de mi estricta confianza. Pero en un futuro es posible que me anime a publicar un libro con los tres trabajos, incluyendo la opinión de ustedes, y de amigos por mi seleccionados.
Si alguno de ustedes ha perdido o no le ha llegado uno cualquiera de los tres trabajos, favor de hacérmelo saber para enviárselo por esta misma vía.
Les reitero que el que decida externar su opinión, puede hacerlo hasta el 31 de diciembre del corriente año.
Mucho cariño para todos. Su padre. Negro Veras.
Santiago de los Caballeros, 16 de octubre de 2012.
Señores
Ramón Antonio Veras Rojas
José Jordi Veras Rodríguez
Ho chi Ernesto Veras Rodríguez
Yury A. Manuel Veras Rodríguez
Alexei Valeri Veras Rodríguez.
Mis queridos hijos:
En adición a mi comunicación de ayer, remitida con relación a mi petición para que elaboren un trabajo conteniendo la opinión de ustedes en el sentido ya explicado en la misma, les envío la presente para aclararles que no es mi interés, en lo absoluto, que emitan sus opiniones en torno al sentir de afecto que tengan o no hacia mi, ni mucho menos espero halagos, muy normal de los hijos hacia sus padres, sino que lo hagan con sentido crítico.
Aspiro a que ustedes sean en sus opiniones bien objetivos, realistas y sinceros. Sólo así esas opiniones serán valiosas y tendrán razón de ser.
Abrazos de su padre.
Negro Veras
He aquí las opiniones de José Jordi, Ho chi Ernesto, Yuri y Alexei
Por: Licdo. José Jordi Veras R.
Tal como lo has solicitado, una vez cada uno haya leído los trabajos-tres para ser específico-, respecto a tu vida y todo lo que ha sido parte de la misma, mi comentario al respecto. Los escritos los enviaste para darlos a conocer a tus nietos, nietas, hijos y respectivas esposas.
Los textos enviados por ti me han servido para conocer y precisar hechos que antes salían a relucir en una que otra conversación familiar en sobremesa; en esas tertulias que eran comunes en nuestro hogar, cuando compartíamos algunas comidas. Si bien es cierto que conocía algunos, con tus escritos pude precisar fechas y momentos específicos; y hasta el porqué de muchas de las anécdotas que se contaban; ya fuera por ti o por mami.
Tus relatos me han permitido entender, en cierta forma, a mi abuela Idalia; y comprender su actitud ante nosotros. Asimismo, con el temperamento de ella, pude afianzar la comprensión del tuyo; y de muchas cosas, sobre el porqué de tus reacciones o forma de pensar. Te soy sincero, me has permitido adorarte y quererte con entendimiento; porque, de pequeño y en la adolescencia, muchas veces no comprendía la razón de muchas cosas que se daban a mí alrededor. En una oportunidad mami pudo hacerme entender algunas cosas sobre tu forma de ser, por la manera en que fue tu niñez; que tuviste que pasar muchas calamidades y necesidades. Mientras leía tus trabajos, evocaba todo cuanto mami me había comentado algunos años atrás; claro, ahora con mayores detalles que me ayudan bastante a conocerte, admirarte y amarte de otra forma.
Los escritos que has puesto en nuestras manos, más que para tus nietos, nietas y nueras, pienso que nos han servido, y nos servirán a nosotros, como hijos y hermanos; porque nos deja saber de qué manera te manejaste en tu vida, a pesar de que ya lo sabíamos; pero no con los detalles y pormenores que ahora nos brindan mayor claridad. He podido palpar cómo fue tu niñez y la forma en que sufriste por las carencias que padeciste; y por qué te molesta la miseria y la pobreza que sufren otros.
Los tres mensajes sirven, a su vez, para saber que, como hombre, padre y ser humano, puedes y eres capaz de contar tu historia, tu vida; y lo haces con valor y transparencia, y esto me hace admirarte más.
Esas exposiciones tuyas son importantes también, no sólo desde el punto de vista familiar, sino porque enmarcan muchos hechos históricos; se señalan personas, con muchas de las cuales hemos tenido la oportunidad de compartir. Y he podido apreciar tu conducta para con los amigos y amigas.
Me has hecho comprender lo que significa tu madre para ti, luego de haber leído lo que fue su forma de ser ante las situaciones que se le presentaron; tomando en cuenta el nivel de educación que tenía, aunque se refleja, por tu narración, su disciplina, responsabilidad, limpieza y honestidad.
Con estos trabajos has hecho posible que nos acerquemos a un pasado no reciente; pero el comentarlo nos permite participar del mismo y nos ayuda a entender muchas de nuestras propias raíces y de qué forma contarlas.
Es importante, vuelvo y repito, que estos manuscritos los hayas puesto en nuestras manos, porque nos hace posible tener mayor comprensión de muchas de las cosas que hemos visto desde niños, pero ante las cuales teníamos respuestas, ni entendíamos en qué momento ocurrieron; muy a pesar de saber de los valores de que estas formado, cuya génesis desconocíamos.
Gracias por brindarnos esa luz a través de estos trabajos.
Dicen que la mejor forma de conocer a otra persona, querida y amada, es entenderla en sus diversas etapas.
Por: Dr. Ho Chi Ernesto Veras R.
Con frecuencia digo, con suma admiración, que la historia de tu vida es un tema genial para la cinematografía; donde la perseverancia de un hombre es capaz de lograr todo lo propuesto y vencer los obstáculos presentados.
Para mí es de mucho orgullo y comprensión leer los relatos de tu niñez; cómo a temprana edad formaste parte de las responsabilidades de tu hogar, enfrentando carencias económicas y una educación familiar estricta.
Comprendo, de manera muy clara, cómo las vicisitudes presentadas a un ser humano, el tipo de trato y educación de parte de los progenitores, influyen de manera directa en el desarrollo de la conducta y personalidad de la persona.
A pesar de las características de tus orígenes, me regalaste una niñez y adolescencia preciosa, conjugada con mucho respeto y reglas claras; y, ante todo, mucho respeto. Aunque, para mi gusto, hubiera preferido algo más de ternura, complicidad y confianza.
Tu juventud no puede ser más estimulante para mí, en el sentido del amor y compromiso con el país; y cómo la constancia, tesón y empeño en lo que crees y deseas, son la clave para triunfar en la vida. Que seas parte de Los Panfleteros, es como una medalla de distinción que llevarás tú y nuestra familia; en honor a la defensa de la soberanía de la tierra que te vio nacer. Graduarte con honores de doctor en Derecho, Magna Cum Laude, es un ejemplo para mí de que todo se puede y no valen las excusas.
La actitud perseverante es una de las principales cualidades trasmitidas por ti a mí, de la cual estaré eternamente agradecido.
Hoy, como adulto, reconozco más el verdadero valor como padre y ente social. Ser tu hijo es un honor, orgullo y compromiso para dar lo mejor de mí y hacer lo correcto.
De nuestro árbol familiar, te correspondió pasar por muchas pruebas de vida que moldearon tu persona. Te agradezco sobremanera que me hayas dado lo mejor de ti y que hoy nos permitas disfrutar de un ser humano más relajado. Te quiero mucho.
Por: Licdo. Yury A. Veras R.
Hay un proverbio que dice "el hombre es él y sus circunstancias”; me viene a la mente inmediatamente cuando me pides que te analice como padre. En verdad, quisiera también expresar mi opinión, porque te veo como un todo de lo que has sido, también como amigo y esposo; esto es así, porque puedo decir que tengo base, más que otros, para emitir mi opinión con respecto a ti en cada uno de esos aspectos. Lo que expresaré, trataré de hacerlo de la forma más objetiva que un hijo puede hacerlo sobre su padre.
Como amigo has dado muestras de ser solidario en el sentido más amplio de la palabra, y no porque tú lo pregones, sino por los actos que a lo largo de tu vida has realizado y que me he enterado por boca de amigos o familiares de aquellos con los cuales demostraste que, para ti, la amistad es un sentimiento que se cultiva, se abona a lo largo de vida y cuando es necesario dar un paso adelante por el amigo o amiga, ahí estas tú. Pero como digo lo uno digo lo otro; sé que, así como eres amigo de tus amigos y por lo intensa que ha sido tu vida, esperas esa reciprocidad para contigo de tus amigos y familiares cercanos; porque a veces eres drástico con aquel que, a tu entender, te ha fallado.
Como esposo de mami, solo tengo, y me basta, el testimonio de ella; cuando nos dijo que tu comportamiento durante su vida matrimonial y en las circunstancias en la que se inició, se desarrolló y finalizó, estuvo más que complacida de la vida .Como todos los matrimonios, no siempre fue un camino fácil, ya que fue una pareja con sus debilidades particulares; pero conscientes y convencidos de cuál debía de ser el rol que juntos debían jugar.
En tu papel de padre es en el que, se supone, debo tener mi concepto más amplio de ti; y lo primero es que tú no eres un papá normal, ya que, como yo te veo, tú no sólo te dedicaste a aportar económicamente, dictar directrices, lecciones de moral y cívica e imponer tu persona en una casa compartida con tu mujer e hijos. No, tú no podías conformarte con eso, por lo tanto debías hacer el esfuerzo de que tus hijos crecieran como seres humanos con valores y principios tan fuertes que resistieran las desviaciones de nuestra sociedad; que crecieran conscientes del amor que nos tienes y ahí es donde tú te me agigantas; porque tú que no eres aquel papá zalamero y muy dado demostrar su cariño con besos ni abrazos, pero increíblemente tus hechos y tu forma de comportarte con tus hijos en conjunto, así como particularmente con cada uno, es que te has ganado mi amor y tengo la convicción de que tengo el mejor padre que la vida me pudo dar.
No eres perfecto, eso lo sabes y no tratas de serlo; pero por lo que y como has vivido, siempre has tenido la manera de actuar y tomar decisiones adecuadas ante cualquier situación que tú creas que nos puede afectar de alguna manera, aunque en el momento no lo entendamos o reconozcamos. Por eso te admiro papi, porque predicas con el ejemplo y tienes el consejo apropiado cuando lo necesito o tú piensas que lo necesito.
Las expresiones "un loco difícil de bañar" y " ese es un hombre cuadrao”,te vienen como anillo al dedo; pero después de leer esos escritos dirigidos a tus hijos y nietos, me has dado las herramientas para comprender más las circunstancias que han forjado tu carácter, personalidad y forma de proceder. Eres un hombre fuera de lo común en esta sociedad y por eso también un papá fuera de lo común; tu trato hacia mí, desde que tengo uso de razón, ha sido ante todo de amor y comprensión. Cuando he tenido mis logros los has disfrutado conmigo y, sobre todo, las muchas veces que he tropezado siempre he encontrado tu hombro para apoyarme, superando mis expectativas.
Ya en esta etapa de nuestras vidas no me corresponde juzgarte porque te acepto como eres y trato de disfrutarte como pueda, buscando la manera “más fácil de bañarte”.
“Un compromiso conmigo y mis hijas”.
Por: Dr. Alexei V. Veras R.
Al ser el más joven de la familia Veras Rodríguez, me resulta más que interesante conocer la formación, vida y trayectoria de mi papá desde su infancia, por medio de sus palabras y relatos; la mayor parte de éstos acontecidos cuando aún no estaba yo en planes de nacer y, otros que, aunque ya vivía, al tener escasos años, resultan desconocidos para mí.
Conocer de la influencia de su madre, Idalia, en la estructura de su formación, permite entender de donde surge la base de la educación que papi ha transmitido durante la crianza de cada uno de sus hijos.
Estos escritos me han dado cátedra del significado de la perseverancia y la preparación, y el resultado que, al mantenerse apegado a estos conceptos, nos trae en la vida. Conocer el diario vivir durante su juventud y época de estudiante, donde las limitaciones económicas y sociales no amilanaron sus deseos de progreso; manteniendo siempre la firme disciplina inculcada en el seno familiar y que ha sido una de las herencias más marcadas que papi se ha empeñado en dejarnos como legado. Aunque, cuando de herencia se trata, una muy marcada es el amor al béisbol; pasión que disfrutamos todos sus hijos y, sobre todo, por su equipo Las Águilas Cibaeñas.
Estas lecturas nos transportan a cada una de las etapas de su vida y nos permiten conocer acontecimientos significativos que hoy en día son la base fundamental del carácter de mi padre.
Dan explicación a cada una de sus respuestas ante situaciones enfrentadas y que influyeron en su manera de pensar. Historias interesantes, relatadas de manera que podemos percibir el corazón noble y solidario del que he sido testigo durante mi vida. Así como también la entrega y pasión que le dedica a todo lo que se propone, demostradas al lograr su investidura de abogado; profesión a la cual se ha entregado en cuerpo y alma, logrando llegar a ser distinguido como el jurista dominicano de mayor impacto en nuestra sociedad santiaguera de los últimos 40 años.
Conocer detalles de su infancia, de su vida material y espiritual, con situaciones que lo marcaron hasta la madurez, me ayudan a entender mejor el carácter de papi. Relatos llenos de enseñanzas que ahora, de adulto, entiendo mejor y valoro mucho más.
Poder compartir estas memorias con mis hijas, resulta aún más satisfactorio; aunque muchas de estas historias resultan tristes, siempre tienen enseñanzas, al igual que otras que cuentan con rasgos humorísticos.
Mi hija Valeria disfruta cada una de las historias de su abuelo, aunque tengo que reconocer que la que siempre recuerda es aquella cuando, como ella la cuenta en sus palabras: “A mi abuelo lo sacaron de una casa porque se comió toda la comida que había.” Aunque no resulta fácil explicarle cada detalle del accionar de su abuelo, es muy grato poder apreciar cómo ella valora el deseo de superación y el tesón en busca de lograr su propósito en la vida. De ahí, lo interesante de una vida cuando una sola persona resulta ser inspiración para muchas.
Cuando la vida pone piedras en el camino, sin duda que leer estas reflexiones nos da el espíritu y enseñanza necesaria para seguir adelante, consciente de que sólo el empeño y dedicación nos guiarán a lograr nuestros objetivos.
Recibir este legado resulta de mucho orgullo y es un compromiso conmigo y mis hijas de mantener vivos en nosotros la honestidad, temple y perseverancia que valoramos en estos escritos y aplicarlas en cada uno de los retos que nos presente la vida.