jueves, enero 14, 2016

José Jordi, feliz cumpleaños


  1. Lo que se espera con cariño y paciencia calculada, su llegada trae alegría, la demora se convierte en una expectativa hecha realidad, añorada aun sin ser todavía conocida. Arribar a la vida, venir al mundo de los vivos y ser recibido como un símbolo, hace la existencia del ser humano animada, festiva, divertida en lo absoluto.
  2. El día 14 de enero de 1969, mi compañera Carmen, dio a luz una criatura de sexo masculino, color blanco, pelo rubio, y siete libras de peso. Mucho antes de parir, Carmen había aceptado mi petición de que si alumbraba un niño le pondríamos como nombre la combinación de José Jordi, como demostración de afecto a dos amigos que había conocido, en la ciudad capital, en mi época de estudiante universitario: José Eneas Núñez y Jordi Martínez.
  3. La presencia de José Jordi, generó fervor en su madre y en mi, no obstante la precariedad económica de ambos. Pero el ambiente familiar donde residieron Carmen y José Jordi, durante los primeros meses del nacimiento de éste, fue sumamente acogedor, hospitalario. En el seno del hogar de Manuel Evertz Cabral y Pura Enrique de Evertz, Jordi se mantenía de los brazos de su madre, a los de su futura madrina Pura, y de los de ésta, a los de su hija, Pura L. Evertz de Canaán.
  4. Hasta el momento del nacimiento de su segundo hijo, Carmen se dedicó por entero a cuidar a José Jordi; le dispensó una atención fuera de lo común. La preocupación por su primogénito fue con esmero, una vigilancia constante; lo protegía hasta de las miradas de los que suponía malévolos. Ambos, Carmen y José Jordi, llegaron a establecer una ligazón sin fisuras, una compenetración infranqueable.
  5. José Jordi, realizó sus estudios primarios en el Instituto Iberia, donde con el apoyo de su director don Pepe, y sus excelentes profesores y profesoras, llegó a convertirse en un buen estudiante, lo que le sirvió para ser en el futuro muy bueno en la carrera universitaria, profesor en el mismo centro académico y brillante profesional del derecho.
  6. Si alguien me pide que le haga una somera descripción de la persona de José Jordi, le diría que él es un adicto al trabajo y meticuloso en su ejercicio profesional; extremadamente honrado; disciplinado, calmoso y con el don de escuchar a su interlocutor; perseverante en el objetivo a perseguir; comedor compulsivo; mesurado en los tragos y tímido en los gastos; buen amigo, mejor hermano, exquisito padre, buen hijo y de un cálido trato familiar; es valiente y arriesgado; exigente en el buen vestir; amante de los deportes; le gusta y disfruta el baile; como religioso es un creyente católico; en política es independiente, con ideas democráticas .
  7. Actualmente, Jordi está casado con Katty Gómez, de cuyo matrimonio han procreado a Miranda y a Mauro.
  8. José Jordi, no obstante las lesiones permanentes que lleva en su cuerpo, como consecuencia de la tentativa de asesinato de que fue víctima, sigue siendo un gran ser humano, sensible y solidario. No está dominado por rencores, hasta el punto de que ha dicho que a Adriano Román, quien pagó para que le mataran, no le guarda aversión, que sólo aspira a que en su caso se haga justicia. 
  9. Debo confesar que después de la acción criminal contra José Jordi, cada cumpleaños suyo es para mi muy especial, porque rememoro los días amargos que, junto a mi familia, he pasado, desde que él permaneció más de tres horas en el quirófano sin saber yo cuál era su estado de vivo o muerto, así como el tortuoso camino que he tenido que recorrer reclamando justicia.
  10. Quiero decirte, mi querido José Jordi, este nuevo aniversario de tu nacimiento lo aprovecho para manifestarte que deseo que conserves el comportamiento que has mantenido en todo el curso de tu vida; sigas queriendo al ser humano, de la misma forma que desde que naciste has sido querido por tus padres, y todos los que hemos tenido la alegría de tenerte como lo que eres, un ser humano excepcional. 
  11. Finalmente, José Jordi, no olvides, ustedes, mis hijos, no son cinco, somos seis.

Tu padre
Negro Veras.

sábado, enero 02, 2016

A 67 meses de la tentativa de asesinato contra mi hijo Jordi Veras

  1. La llegada de un nuevo año me da más confianza para continuar reclamando justicia en el caso de la tentativa de asesinato contra mi hijo Jordi; la esperanza en alcanzar lo que es un deseo legítimo, fortalece mi convicción de que ha de imponerse la ley, me alienta para permanecer con la creencia de que no va a imponerse la impunidad.
  2. La tardanza que alegremente persiguen los que se asociaron para matar a Jordi, no será un obstáculo para que la vara de la justicia les alcance. La demora en la sentencia final jamás me desviará del objetivo de que el que pagó para el crimen, y los que lo planificaron y ejecutaron, reciban la sanción que merecen. El tardar el proceso no va a impedir que prevalezca la ley, el derecho y la sana justicia.
  3. Aunque han transcurrido 67 meses desde el 2 de junio de 2010, fecha que fue ejecutada la tentativa de asesinato contra Jordi, nunca ha estado presente en mí, la desesperación, el abatimiento ni la desmoralización; me mantengo sereno, animado y lleno de aliento. No renunciaré nunca, ni abandonaré jamás reclamar justicia; la consternación producida por el hecho contra mi hijo, no me impone la resignación.
  4. La acción criminal contra Jordi, puso de manifiesto que una forma nueva de delincuencia, amparada en el dinero, había hecho acto de presencia en el país, para matar, desalentar y amedrentar a los hombres y mujeres de bien. Pero la sociedad dominicana debe estar consciente de que el pistoletazo nunca puede llevar a este medio social a aceptar que el crimen pagado imponga la postración, la tristeza y el desánimo.
  5. Por muy deteriorado que está el círculo dominicano, la criminalidad no puede imponerse al deseo de los que aspiramos a vivir en un ambiente de seguridad, y que el pago de la tarifa de los sicarios rompa el derecho a la vida, la tranquilidad, y a no estar en permanente estado de peligrosidad, en constante sobresaltos, dominados por el susto, horror y espanto.
  6. De la misma forma que los que trataron de asesinar a Jordi, rompieron la existencia serena de mi familia, el crimen organizado ha quitado a la sociedad dominicana placidez, relajación y la quietud que merece. La responsabilidad cívica y ciudadana nos impone no entregar el espacio de la seguridad a los asesinos por encargo, a los que ejecutan crímenes de diferentes facturas.
  7. Lo que en verdad se llama pueblo dominicano, tiene derecho a disfrutar de tranquilidad, orden y sosiego; a no permanecer trastornado e impaciente por el crimen, el sicariato que sólo sabe crear perturbación y contratiempo social. El fastidio de los antisociales está llevando a la comunidad decente a constante conmoción, con los ánimos alterados, a punto de perder el juicio.
  8. En forma reiterada he dicho que mantenerme firme reclamando justicia en el caso de mi hijo, es una cuestión de honor. La consideración que reclamo para todos los seres humanos, la exijo sin limitación alguna para mi familia, y al actuar así no hago otra cosa que actuar conforme mi sentido del valor de la vida de la especie humana, sin distinción de clase, etnia o condición social.

Santiago de los Caballeros,
2 de enero de 2016.